Sobre el mar se eleva una luna espléndida.
Tú y yo la contemplamos desde dos extremos de la tierra.
Lamento que la noche sea muy larga y desvelado, te añoro apasionado.
Apago la lámpara: la luz de luna me encanta llenando todo mi cuarto.
Me pongo la capa y salgo.
Siento el rocío muy denso.
Me entristece no poder recoger un puñado de luz y ofrecértelo. Regreso y me acuesto.
Ojalá te vea en el sueño.
Zhang Jiuling
0 Comentarios.:
Publicar un comentario